– Hola Pepe, qué tal, ¿Por qué estas tan cansado?
– Es que vengo de enterrar a mi suegra.
– ¿Era muy pesada?
– No, no era pesada, sino que no se dejaba.
– Hola Pepe, qué tal, ¿Por qué estas tan cansado?
– Es que vengo de enterrar a mi suegra.
– ¿Era muy pesada?
– No, no era pesada, sino que no se dejaba.
0 Comentarios