– Mamá, mamá, en el colegio me llaman ingenua.
– No hija, lo que pasa es que tienes la cabeza llena de pajaritos.
– Ay, ¡Quítamelos, quítamelos, quítamelos!
– Mamá, mamá, en el colegio me llaman ingenua.
– No hija, lo que pasa es que tienes la cabeza llena de pajaritos.
– Ay, ¡Quítamelos, quítamelos, quítamelos!